lunes, marzo 05, 2007

como en las pelis de espias, donde el mensaje se autodestruye una vez ha sido leido, así me gustaría que ocurriera con lo escrito.Que quien leyera se encontrara, al abandonar la boca la última palabra, con un puñado de ceniza en las manos.
...y de alguna forma así sucede, lectura como epitafio de lo escrito.