miércoles, octubre 31, 2007

fue todo normal, pero a mí no me lo pareció. Cuando llegué a la bibloteca ya estaba cerrada. metí el libro en el buzón de devoluciones que han instalado en la puerta.Algo salvaje, la caida que el libro tiene que librar hasta llegar al fondo. Palabras maltratadas.regresé a la semana siguiente en busca del tomo gris dificil de cajero camaleónico (este nombre lo adoptó después). En la puerta me dí cuenta que no tenía el carnet de biblioteca, lo había extraviado. Memoria , acude, . Entonces me asaltó una imagen donde yo me veía colocando el carnet donde figura mi foto entre las páginas de la biografía de canetti. Lo utilicé como separador de páginas. Allí debió quedarse y quizá en la caida al abismo del buzón salió volando. Entré en la sala, me deslicé como una ladrona por los pasillos, busqué la "c" de canetti, y ya frente al lomo encontrado prolongué el momento de alcanzarlo. Despacio lo llevé a mis manos y lo abrí. allí estaba, yo en mi doble, entre las páginas en las que permanecí encerrada en la biblioteca toda la noche.
a los de la misma era
a los de la misma hebra
leedme
soy un frasco opaco
de oxígeno pasteurizado

martes, octubre 30, 2007

fue todo normal, a mí no me lo pareció.Caminaba hacia la peluquería con un formato ladrillo anagrama para mi entretenimiento en tan desquiciado lugar.Antes me detuve en un cajero automático a sacar dinero.Me fuí rápidamente pues pensaba que llegaba tarde, y digo pensaba o creía pues nunca llevo reloj y como no se qué hora es exactamente, tan sólo puedo hacer estimaciones al vuelo.Cuando estaba a punto de llegar me dí cuenta de que algo me faltaba.Siempre llevo un peso imposible en la mochila, y esta es sin duda la razón de que pierda tantas cosas. La continua sensación de peso me impide calibrar lo que llevo y lo que me dejo en el camino.El libro, lo que me faltaba era el libro.Estaba segura de haberlo cogido de casa.Lo llevaba en la mano.Era un libro prestado de la biblioteca pública . No podía perderlo.Lo habré dejado en el cajero, pensé. No creo que me lo roben, ¿quién hoy robaría un libro?No lo he podido dejar en el cajero, pensaba mientras volvía. Es un ladrillo, lo habría visto antes de salir.!cómo no esté!!llegaré tarde a la peluqueria!(esta sí es una frase eminentemente femenina).Casi en la puerta del banco mis ojos saltaron ansiosos sobre el cajero. no se veía nada.Allí no está,maldita cabeza!fue impresionante, verlo aparecer, como un camaleón descubierto, las tapas grises del tomo de anagrama asomaron de la superficie idéntica e imposiblemente gris de aquel cajero mágico. el mismo color gris, el mismo y dificil color gris del cajero casi rapta mi libro prestado. la contraportada era la parte visible y la reseña en pequeñas letras negras casi no se veía. Aún no soy capaz de explicarme por qué este acontecimiento, en apariencia tan banal, causó en mí una emoción tan ...Y no fue la alegria del objeto encontrado, sino el descubrimiento de su trampa perfecta la que lo convirtió en un hecho incomparable y vivo.

lunes, octubre 29, 2007

ya es la segunda vez que las encuentro tumbadas en el tejado, absorviendo el sol, ajenas a lo que está ocurriendo en la callle.Esta vez no son palomas, ni atolondradas adolescentes . El escapismo es de mis sombras , que desobedeciendo todas las leyes han decidido proclamar su independencia de los cuerpos, de todos los mios ,caóticos y desprevenidos.¿quién así ha perdido el rumbo de la unidad que me indique la dirección de la casa de empeños donde tocan las campanas que llaman al texto neutro?!qué delicia no ser escuchada!...no estar a la escucha.

viernes, octubre 26, 2007

vendió la casa y dejó escrita una frasecilla en un rincón invisible. Pretendía que en algún momento los nuevos inquilinos la encontraran al azar.Yo tenía una estrecha relación con los nuevos dueños.Cenábamos todos los sábados y de alguna manera no podía evitar esperar en cada uno de estos encuentros que en el momento de los postres me dieran la noticia de un descubrimiento asombroso, que recitaran orantes las palabras aparecidas. Que esas palabras chocaran contra sus vidas como la quilla en el iceberg. Ellos no podían saber de las razones de mi gesto impaciente cuando hablaban del cambio de muebles en el salon , ni de mi semblante desolado al terminar la velada. Mi propia vida se convirtió en espera. Ninguna lectura pudo ya devolverme la serenidad. Sólo esperaba la llegada de aquella sentencia, como quien espera la llegada del mesias. Algunos sábados las cenas se celebraban en aquella casa. Y yo me veía reflejada en el espejo del recibidor, pálida .El estravío con el que mis ojos recorrían muros, puertas y rincones terminó por alertar a todos. Pensaron que algo fuera de aquella frase me tenía hipnotizada.Por eso, cuando incendié la casa y enmudecí nadie supo dar una explicación.

miércoles, octubre 24, 2007

cita 48

"Cometí entonces un error, me acerqué un poco más, me senté a su lado, en la cama y saqué un libro de mi bolsillo, el libro de un poeta, y le leí un fragmento. Él escuchó en silencio. El texto en cuestión hablaba de Narciso y de unos bosques casi ilimitados poblados de hermafroditas.Cuando terminé no hizo ningun comentario. ¿Qué te parece?, le pregunté.No sé, dijo, ¿qué te parece a tí?Le dije entonces que yo creía que los poetas eran unos hermafroditas y que sólo entre ellos podían comprenderse. Dije: los poetas son.Quise decir: los poetas somos.Pero él me miró como si mi rostro careciera de carne y sólo fuera una calavera, me miró sonriendo y dijo: no seas cursi, Perla.Sólo eso.Yo empalidecí, dí un salto, sólo conseguí apartarme un poco, intenté levantarme pero no pude, y durante todo ese rato él permaneció inmóvil, mirándome y sonriéndome, como si de mi rostro se hubiera desprendido la piel, los músculos, la grasa, la sangre y sólo quedara el hueso amarillo o blanco. Al principio fuí incapaz de hablar.Luego dije o susurréque ya era tarde y que me tenía que ir.Me puse de pie, le dije adiós y me marché.Él ni siquiera levantó la vista de su libro.Cuando atravesé la sala vacía, el pasillo vacío de su casa silenciosa pensé que nunca más lo volvería a ver."
ROBERTO BOLAÑO en "los detectives salvajes"
están aparcando el coche, uno de esos que parecen de toreros( la psicología de los objetos), mientras los observo esperando, estoy cansada y tengo ya ganas de irme, pero sigo esperando. El coche maniobra alante y atrás , un poco cabezón, una y otra vez. Desde la ventanilla del copiloto se distingue a una mujer rubia de aspecto muy cuidado.No puedo ver al conductor pero lo imagino de mayor edad y feo. quizás ella esté con él por su dinero.M e apoyo en la pared y continua mi espera. ahora sólo puedo ver la parte delantera del vehículo que continúa maniobrando torpemente.La mujer se ha bajado del coche y desde la acera y dirigiendo sus palabras al conductor y sus intenciones a algun ser superior dice: !dame paciencia!La frase cae a plomo sobre mi propia espera. Me la adjudico, la robo porque la necesito. Estoy muy cansada pero la escena me ha hecho recobrarme.Del coche de torero sale el conductor , que resulta ser una chica pequeña y desgarbada. Se alejan. yo aun espero, algo confusa.

martes, octubre 23, 2007

horadas el papel con tus afiladas palabras, ¿has pensado en dejarlas en el límite y que la escritura se calque? para leerte necesitaremos un espejo. horadas el papel con tus afiladas palabras y solo nos dejas los ilegibles huecos . Labra un surco en la hoja. Por el envés te recitaremos frente al espejo.

lunes, octubre 22, 2007

los restos de tinta que veo en tus dedos me dicen que has vuelto a escribir. No aprenderás nunca , escribes postales y olvidas el nombre del destinatario .¿Cómo puedes llevarte bien con el cartero?Por todas partes hay rastros de tinta, sobre los muebles, allí donde de forma indolente dejaste caer tu mano.Has vuelto a escribir y como si un animal hubiera pasado, el salón no se reconoce.Esa tinta que se esparce por encima de las cosas será tu perdición.
la invención de la invención.
¿dónde están las voces aquí? no están.
el miedo no las convoca.
el miedo , ¿a qué?
el singular es un señuelo impúdico .
El plural, un perverso jugar a la gallinita ciega.

miércoles, octubre 17, 2007

bien mirado no hay por qué alejarse de las cosas, las cosas son la misma distancia, jugamos puerilmente con ellas como si nuestra inmortalidad fuese duradera . No es de extrañar que nuestro semblante cambie veinticuatro milenios por segundo. Somos la mueca interpretada de nuestras vidas y aun nos quedan registros para aburrir. el gesto de repetición es inmune a esa distancia . Las cosas, cosas, están así dentro.








lunes, octubre 15, 2007

no voy a sacar más palabras de la manga, no haré desaparecer parte del cuerpo escrito, ni a jugar con los ojos de los otros,ni adjetivaré el mundo ensartando pañuelos de colores. No hay chistera por la que asomar este frío pensamiento.De mis dedos no se deslizará la mágia de los nombres. Yo no tengo la varita.

abreviando la vanidad

yo seré breve

tu serás breve

él será breve

ella será breve

nosotros seremos breves

vosotros sereís breves

ellos serán breves

lunes, octubre 08, 2007

en cada linea subterránea quedan los canales de una corriente épica. Para los anales de la historia, la superficie y las fuentes. Y en esos hallazgos registrados por los vencedores no hay mapas que nos vinculen a la escritura de los dioses. Ni nos queda tiempo para perforar el mundo , ni estos pozos asomados traen espejos retrovisores ni manuales y traducción para la tinta invisible de los vencidos.

jueves, octubre 04, 2007

aquí estoy si creo que lo que desenfoca la tierra es la nítida arena.
haciendo de las letras un mobiliario poco práctico
y dejando que se aposente el polvo de los dias,
no quisiera ser tan altiva cuando los cúmulos trabajan al margen
de nuestras intenciones,
pero qué madeja se desorganiza si en ello pierde la vida,
todo lo que creo
está fuera de
y aquí
estoy.